Vas de persona en persona, robándoles hasta el último aliento.
Mientes, finges, muestras una cara que no es la tuya. Te adaptas a lo que te conviene, para disimular entre tus nuevas víctimas.
Falsa. Manipuladora. Traidora. Mentirosa.
Destruyes fragiles vidas. Te conviertes es su mundo cueste lo que cueste, les haces dependientes con tu mentiras y falsas sonrisas, provocas situaciones en la que tú siempre eres la víctima de todo. Les das lástima y les dices cuatro cosas bonitas para camelarlos y tenerlos comiendo de tu mano, como estupidos.
Y luego lo destruyes. El mundo que inventaste cae por su propio peso.
Porque nada es eterno y las mentiras son tantas que se acumulan unas sobre otras. Son tantas que no te acuerdas de todas y fallas. Y ahí es donde todo se derrumba. Donde te ves descubierta y tu verdadera cara se muestra.
Y ahí es donde se demuestra que TÚ eres la ESTUPIDA. Te crees tan superior he infravaloras tanto al resto que ni siquiera te das cuenta de tus multiples errores y las brechas que hay en todas tus historietas.
Y siempre se repite, nunca aprendes de tus errores y sigues haciendo daño a la gente. Uno tras otro, les vas dañando.
Nos dañaste a nosotras, a mis amigas. Y no contenta con ello sigues rondando tras la gente que me importa, haciendoles daño. Y lo que mas rabia me da es que no puedo decir nada.
Al principio tus mentiras son demasiado creibles y eres la victima perfecta. Eras la pobre niña a la que sus ex-amigas siempre trataron mal. Mentiras. Todo mentiras. Pero ya es demasiado tarde cuando todo queda al descubierto.....
No soportaré más ver como les haces daño. No más. Se acabó. Traspasaste la linea. Le hiciste daño a alguien importante para mi y por eso si que no paso. No se cuanto tendré que esperar, pero no me importa. La venganza es un plato y frio y soy lo suficientemente fria y paciente.